que nos
enseñan a ver más allá de la mente.
Días de raíces
que nos acercan
entre las
brumas y las nubes.
Días de
ensueño que nos traen
los
recuerdos de aquellos viejos tiempos.
Días de
vino, rosas y panderetas
que nos
alegran la esencia de ser en la memoria.
Días
especiales que hacen
que vivamos
nuestros propios carnavales.
Días de cercanía
que hacen
que los
cuerpos se mojen
solo por la
presencia del otro.
Días de amor
entre amor, por amor y para el amor.