Dormir es
complicado.
Pensar se me
hace mas difícil
y caminar
imposible.
Estoy parado
mientras el
tiempo sigue su camino.
Los pasos se
vuelven en mi contra
pero no me
puedo mover.
La realidad
supera a la ficción
y la mentira
se convierte en instrumento,
innecesario,
para tapar
los males escondidos
en la propia
sombra de la gestión.
La
credibilidad no existía ya hace tiempo…
pero los
caminos andados
se
convierten en la luz mas clara
que ha de
guiar
a los que
aun creemos en la vergüenza.
Demasiados
aun.
Vergüenza, “señores”.
VERGUENZA