Yo me quedo en casa.
Con la distancia que nos separa,
dejo que mi mente sola,
te sienta entre mis manos
y que tu cuerpo dibuje olas de placer
que atraquen en el mar del deseo.
Y que el barco de los sueños
me ayude a permanecer encerrado
esperando poder hablarte desde lejos,
como si estuviese a tu lado.
Quiero pintar el lienzo
del sueño más hermoso
donde tu cuerpo y mi cuerpo
son dos unidos en uno solo.
Quiero que los colores se mezclen
y que los orgasmos se sucedan
y que los dedos sean el pincel
donde aniden las estrellas
y que la Luna y el sol se unan para siempre
allá donde viven las mareas.
Y que los sueños no sean solo sueños
y que cada uno en su casa desee
que finalice esta reclusión eterna
para que las luces del día nos sirvan
de abrazo infinito bajo las estrellas.
Por tantas veces deseado.