Busco la
suavidad de tu pelo.
sabiendo que
mis dedos están ahí dentro,
acariciándolo
y sintiéndolo
como a ti
misma te siento.
Vivo inmerso
en la eternidad de tu espalda,
acariciándola
desde el cuello
hasta el
final en donde acaba.
Sintiendo como
mis manos
se realizan
como palomas
que vuelan
hasta su nido
donde
habitan las hadas.
Vivo de forma
clara la vida que tengo
y que solo
es vida si tu vida a mí se ata.
Vivo por mi
para ti
en cada
gesto y en cada palabra.