diumenge, 11 de gener del 2015

Aprendiendo a ser yo mismo




Aprender cada día a respirar
el mismo aire que tú respiras
y hacerlo a milímetros escasos de tu boca.
Repartir el aliento
entre tus labios y los míos
y que nuestras lenguas saboreen
cada instante de nuestras esencias.
Y permanecer en silencio,
con nuestros labios pegados
y las manos recorriendo nuestro cuerpo.
Alardear de amor en el viento del fuego.
Y dejaré cada noche que las ganas y deseos
se unan en nuestros sueños