inundando
mis deseos.
Un momento
de felicidad encendida.
Sin dudarlo
ni un instante…
siempre
pienso en ti.
Una milésima
de deseo
entre instantes
de lujuria.
Necesidad de
encontrar el sitio
en cada uno
de mis movimientos
para
permanecer
de forma
perenne a tu lado.
Acercarme a
ti,
sin reparos,
sin prejuicios,
sin lamentos.
Consciente
de ti y de mi.
Nuestros
abrazos en el tiempo,
a pesar de
la distancia.