pero la
mente y mi corazón
no para de
latir,
con más
fuerza si cabe,
de forma
desesperada por ti.
Lucha en mi
interior
con el deseo
de verte y tenerte,
abrazarte y
sentirte,
olerte y
acariciarte,
amarte y
poseerte,…
venceremos a
la noche y la oscuridad
y la luz de
nuestro amor
brillara
firme en el cielo,
por encima
de las luces y las sombras.
Seremos la
estrella más luminosa
de la noche
y el día.