Quema el cielo si no estás tu

Ya no aspiro a tocar el cielo con mis manos

si tu cuerpo no va a estar allí dentro.

Quiero realidades que dejen atrás un pasado

para reencontrarme con un tiempo feliz.

Quiero luces y alegrias llenas de deseos irrefrenables

y no mas reticiencias en la vida, que solo buscan males.

Quiero unos labios que besar y un cuerpo que acariciar.

Quiero el placer de las neuronas arrinconada en tu sombra

y ver florecer en el camino llano de la vida,

amalgamas de mis sueños para caminar con ellos

hasta el fin del averno, allá donde el amor es amor,

sin tener que pensar en que somos ni en que seremos.

No mas sufrimientos

Sufriendo,

bajo el barro de tus pies.

De forma desesperada

por la presencia escondida de tus alas,

bajo el manto estéril de la irrealidad.

Amar es sentirse preso

de la esponja que absorbe tu violencia

y que deshace mi inocencia,

para desgarrar de una vez

las doctrinas mal enseñadas

y romper con la abominable presencia

de tus dagas y tus armas mal idolatradas.

Luchar contra la irracionalidad

para ganar un presente y un futuro,

dejando atrás el pasado.

Porque lo más hermoso en la vida

es vivirla sin la presión de los que dañan.

Vivir por vivir no me vale.

Vivo para la alegría de mis entrañas.

Mirando en el espejo del alma

Cuantas verdades vemos

cuando miramos el espejo del alma.

Cuantos recuerdos imborrables

que nunca se apagan

y que con solo unas palabras

se relanzan en la mente

para recordarnos deseos y placeres

de nuestras batallas de enamorados en ciernes,

de los que de verdad se extrañan.

Aun con la distancia que nos aleja,

en nuestra mente están clavadas

aquellas imágenes que permanecen

escritas con fuego en el alma.

Saber que estas y que la vida es más fácil

sabiéndote cerca del corazón y de la mirada.

Mirando el espejo de la mente

donde se apoderan las alas de nuestros sueños

y  nos acercan, despacio,

a encontrarnos de nuevo.

Si no es hoy, quizás sea mañana.

Dormir con los ojos abiertos

Como pasa el tiempo en tu ausencia.

Ignorando mi presencia

y buscándote entre fotos y recuerdos.

Renacer a la intensidad del presente

viviendo con tus anhelos y deseos.

Tantas voces en mi mente

pidiendo a gritos que las deje salir y volar.

Tanto tiempo a mis espaldas,

llevando el peso de la necesidad

de tenerte atada a mi lado

para no dejarte escapar.

Hacerte feliz con mis dedos,

con mis manos, con mis labios,…

penetrar en tu mente

para regalarte todos

y cada uno de mis sueños.

Soñar despierto

que en la noche la muerte acecha.

Mejor dormir con los ojos abiertos.