Volver al
mar.
A tu lado y
de tu mano.
Cuantos recuerdos
acumulados.
Cerca de ti
y sentir de
nuevo la brisa marina
que tanto
extrañaba a tu lado.
Mirarte a
los ojos
y con
suavidad cogerte de los hombros,
acercarte a
mí
y besar tus
labios con frenesí.
Sentir como
tu respiración se acelera
y tus ojos
se clavan fijamente en mí.
Notar como
tu mano
me recorre
suevamente y despacio
hasta desatar
el placer.
Esta vez no
soñaba.
Estaba
despierto y sintiéndote.
Fuego eterno