Decididamente
las estrellas
están dispuestas
a hacernos
compañía de
forma seria.
No buscan
más momentos
que aquellos
que estamos perdiendo,
separados
desde el mismo universo.
Cuantas llaves
necesitaría
para poder
trepar a tu ventana
y quitar ese
candado
que me
cierra la entrada a tu alma.
Vivir con la
razón de amarte
en el
silencio de la noche,
allá donde
la Luna sabe donde te escondes.
Y sacarte de
tu guarida
cual animal
escondido
y hacerte el
amor en silencio,
mejor si es
al lado del nido.
Buscarte entre
sabanas blancas
para ver
como renace la Luna
y me
acompaña por todo tu cuerpo
acariciándote
con espuma.
Llenarte de
besos cada rincón
para poder
acabar anidando
en lo más
profundo de tu corazón.