Un cristal
con brillo
en el que
añoro los recuerdos.
Un beso cálido
y húmedo
que pega mis
labios con los tuyos
como aquel
primer beso con quince años.
Una simple
caricia que hace
que mi corazón
se estremezca
sintiendo el
ritmo frenético que marca el tuyo.
Bombear de
sentimientos
que afloran
en un ritmo salvaje
que ambos
llevamos dentro.
Desnudez total
de dos almas
que buscan
encontrarse en silencio
para lanzar
gritos en aumento.
Tu cuerpo y el
mío estremeciéndose
cuerpo
adentro y en secreto.
Sexo con
amor… amor por el sexo,
dos amantes
eternos queriéndose en silencio.