Ya sé que no
estoy loco.
La locura es
pasajera y amarte es eterno.
El amor va
más allá de la conciencia.
Viaja en un
mundo mágico
donde las
luces se encienden en la cabeza,
las
mariposas juegan en tu interior
hasta que las
risas vencen a las penas.
No hablamos
de un mundo eterno,
sino de la
eternidad entera.
No son
piedras en el camino,
son obstáculos
que hay que bordear
para estar
juntos más tiempo.
Es vivir en
medio de la nada
para
encontrar el todo a tu lado.
Sin silencios,
con risas y con gemidos,
con alegrías
y sin lamentos.
Levantarnos cuando
caemos
para estar
viajando en el tiempo.
Juntos plenamente,
disfrutando
de nuestros cuerpos
en cada uno
de todos los momentos.