Una y otra
vez mas
mi mente sabe
donde anidan
los sueños de las hadas.
Nunca un
despertar sería tan hermoso,
como para
descubrir al otro lado,
tu canto de
sirena
escondido
tras la luz de tus ojos.
Soñar es fácil.
A veces.
Tu luz
enciende el día
de reflejos
de agua
bajo la
caricia de las olas
en una noche
de luna clara.