No lo dudes ni un instante.
Camina hacia adelante
y da los pasos necesarios.
Que nadie te corte las alas
Y menos antes de volar.
Que el viento sople a favor
y que la popa de tu velero
sepa navegar a barlovento.
Y sobretodo piensa y actúa.
Si en algún momento de tu día
piensas en mi, no lo dudes y dímelo.
Me harás más feliz.