dilluns, 21 d’abril del 2014

No queda nada para encontrarnos de frente



La oscuridad de la alcoba
me hace imaginar seres fantásticos.
Luces y sombras
reflejadas en el trasluz de la ventana.
Silencio que precede
a tu imagen en mis retinas.
Cuerpo moldeado por mis manos
y encendido por tu mente.
Curvas y formas
que hacen ver como mi deseo crece y crece.
Angustia de no tenerte.
Ganas inmensas de poseerte.
No queda nada para encontrarnos de frente 
y amarnos, sin pausas, eternamente.